El Valencia espera recuperar a Vicente para ratificar su liderato en Málaga

Pablo Hernández da el susto al doblarse el tobillo y hoy se decide si viaja a La Rosaleda

La plantilla del Valencia volvió ayer a los entrenamientos sin apenas tiempo para disfrutar del privilegio de ser el líder de la Liga. En los rostros de los protagonistas se adivina la satisfacción que produce dicha posición, el trabajo se lleva a cabo de manera amena, distendida y con bromas durante el mismo, pero la cabeza está ya en Málaga. La victoria sobre el Osasuna, tal vez por lo costosa que resultó, ha dejado una buena dosis de confianza en las propias fuerzas y el convencimiento de que el equipo no desespera, la paciencia demostrada fue una de las claves del último triunfo, actitud que puede ayudar en muchos aspectos de cara al futuro.El Valencia continua explotando la bonanza del calendario y lo debe seguir haciendo. Málaga es plaza más que asequible, como lo debe ser el domingo el Deportivo en Mestalla. Pero, paso a paso. Unai Emery va a disponer para La Rosaleda, probablemente, de más futbolistas de los que ha tenido hasta ahora, pues es posible que por fin pueda contar con Vicente, metido ya en la última fase de su recuperación. Ayer todavía se ejercitó en un campo anexo al que lo hacían sus compañeros, pero ya no siente dolor y debe estar listo en las próximas horas. Si las sensaciones son buenas podría entrar en la convocatoria de mañana. Si, por contra, se opta por no precipitar su regreso, lo haría para recibir al Deportivo.El susto de la jornada de ayer lo dio Pablo Hernández, mientras participaba en uno de los partidillos de tres contra tres que Emery organiza. Tras una pugna por el balón con un compañero se torció el tobillo y por momentos cundió la alarma, ante las muestras de dolor del futbolista que tuvo que ser retirado en la camilla. Examinado en las dependencias médicas de la Ciudad Deportiva se comprobó que la torcedura no revestía gravedad, hasta el punto de que se descartó que hubiera esguince. Pablo se tranquilizó y, con el tratamiento que se le dio, existe confianza en que hoy pueda entrenarse con normalidad. Habrá que ver su estado cuando llegue a Paterna, aunque existe un moderado optimismo y se cree que podrá hacerlo y viajar a Málaga.El que no lo hará, a pesar de que su vuelta se ve muy cerca, es Carlos Marchena, muy recuperado de su tobillo. Realiza parte del trabajo junto al grueso de la plantilla con total normalidad, ayer repitió para, posteriormente, hacer carrera contínua en solitario. No sería extraño que Emery pueda disponer del central andaluz para el partido del próximo domingo contra el Deportivo, choque que dirigirá el árbitro vasco Pérez Lasa..A más largo plazo se ve el regreso de Rubén Baraja, recuperación que se ha dilatado debido a la recaída que sufrió. Como le sucedió hace dos temporadas, está teniendo mala fortuna con las lesiones ya desde el comienzo de la competición. Mientras, David Silva permanece escayolado y a reposo, a la espera de cumplir las tres semanas que debe estar así, antes de dar paso al trabajo de recuperación que le marcará el doctor Cugat. Por otra parte, Maduro no participó en el entrenamiento de ayer por culpa de una gastroenteritis. El centrocampista holandés acudió a la Ciudad Deportiva para ponerse a las órdenes del doctor Giner, quien le dio tratamiento y le mandó de nuevo a casa.