La zaga de urgencia de Pellegrino depende del muslo del portugués, que continúa con dolor
A. GARCÍA / P. CALABUIG Joao Pereira se marchó cojeando de Paterna. A penas podía apoyar el pie. Caminaba a duras penas. Muy lentamente y con ligeros síntomas de dolor. También de preocupación. La misma que tiene Mauricio Pellegrino. El lateral derecho continúa siendo seria duda para el partido de Champions de mañana ante el Lille por el fuerte golpe en el muslo izquierdo que arrastra desde el partido ante el Zaragoza. Y lo peor es que su presencia condiciona toda la parcela derecha de la línea defensiva. No hay más efectivos atrás. La sanción de Rami y las lesiones de Ricardo, Mathieu e incluso de Albelda obligan a esperar la evolución del portugués. Ayer puso en manos de los fisios en doble sesión, hoy volverá a tratarse y será entonces cuando se decida si entrena o no. Si está recuperado, el Flaco echará mano de Barragán como central
No hay comentarios:
Publicar un comentario