¿Marcharse a Turquía o quedarse en Valencia? La volátil cabeza de Manuel Fernandes se debate entre estas dos opciones, mientras el resto de partes ya han alcanzado un acuerdo. ¿Crees que Fernandes se echará atrás?
Pese a que hace un par de días la decisión de marcharse al Besiktas parecía tomada, los acontecimientos de las últimas horas invitan a la cautela. Fernandes es así: capaz un día de mandarlo todo al cuerno un día y querer salir del Valencia, y pocas horas después pensárselo mejor y recular.
El presidente y las altas esferas del club están de uñas con el futbolista por sus cambios súbitos de opinión. El jugador, como ya pasara en verano, pidió hace un par de semanas a su agente que le buscase una salida. Jorge Mendes, su representante, lo hizo en tiempo récord: en agosto fue el Málaga de Josualdo Ferreira, ahora es el Besiktas de Schuster.
En ambas negociaciones, el Valencia llegó a un acuerdo total con el club de destino, que pagaba la ficha de esta temporada y adquiría a Fernandes en calidad de cedido hasta junio de 2011, y con el agente del jugador. En agosto, Fernandes rechazó la propuesta en el último momento. Ahora, desde el Valencia temen una nueva marcha atrás.
Fernandes, mientras, deshoja la margarita. Su intención era irse a Turquía, tener continuidad y regresar en verano al Valencia, donde piensa que Emery ya no será el técnico blanquinegro. De este modo, podría tratar de convencer al nuevo entrenador, o bien mejorar su posicionamiento en el mercado de cara a recalar en clubes de mayor potencial pertenecientes a la Premier o la Serie A italiana.
No obstante, la opción de compra que el Valencia ha incluido en el trato con el Besiktas, de entre 4 y 5 millones de euros, no entraba en los planes del jugador. De ahí el compás de espera. De ahí que el jugador siga mareando la perdíz a la espera de tomar una decisión.
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