P. CALABUIG / M.C. GALLART Minuto 47. Dani Parejo encarrila la eliminatoria copera de octavos de final con una acción digna de grabar en DVD. El propio jugador de Coslada provoca un libre directo a dos metros de la frontal del área. Dani planta el balón con mimo. Da un par de pasos hacia atrás, al tiempo que con los ojos busca el hueco en la portería de Osasuna. Parejo avanza y golpea con el empeine interno de su bota derecha. El balón coge la altura necesaria para superar la barrera y, una vez la ha superado, el efecto lo hace bajar para entrar como un obús por la derecha de Riesgo. Inalcanzable.
Un gol de falta en el Reyno de Navarra con el que el Valencia comenzó a ver más cerca los cuartos de final „al final Soldado certificó la victoria por dos goles a cero„, pero, sobre todo, un golpe de efecto en lo personal con el que el centrocampista madrileño redondeó un partido notable al lado de David Albelda y Éver Banega y que, además, le sirve para reivindicar un espacio en el nuevo orden blanquinegro de Valverde.
La diana de ayer en Pamplona es la primera de Dani Parejo como jugador del Valencia. «Es mi primer gol aquí, estoy contento más que nada por el colectivo porque nos ha servido para ganar», indicó tras el partido. Desde que el club de Mestalla lo fichó en el verano de 2011 por seis millones de euros el ex del Getafe ha disputado un total de 44 partidos oficiales en los que ha anotado este único gol. Un bagaje bastante más pobre que el que tenía en su anterior equipo, el Getafe, con el que convirtió 11 goles en dos temporadas. Hasta el libre directo de Pamplona, el último tanto que Parejo había marcado databa del 3 de enero de 2011 frente al Real Madrid en el Coliseum.
Es más, cuando llegó al Valencia lo hizo con el cartel de llegador y buen lanzador de faltas. «Cuenta con un gran golpeo a balón parado. Junto a Tino, el Valencia tendrá dos grandes ejecutores de faltas y jugadas de estrategia», dijo Braulio Vázquez al poco de haberlo fichado. Ahora, por fin, Dani ha podido quitarse la espinita con una de sus especialidades. No anotaba un gol de falta desde noviembre de 2009, fue en la goleada por 5-1 del Getafe al Xerez. Por los momentos difíciles con el Valencia, donde aún no ha alcanzado su mejor nivel, Parejo quiso dedicar su primera diana en el equipo a los que a su lado «lo han pasado mal». «A mi familia, a mis amigos, a los que lo han pasado mal y han estado ahí, y me han ayudado mucho», comentó.
Dani se siente «a gusto»
En el encuentro frente a Osasuna Dani oxigenó la salida del balón y ayudó en compañía de Éver en la segunda línea de presión. Es decir, en el Reyno se vio a un mediocentro implicado físicamente, «a gusto» y con fluidez con la pelota en los pies. Y así lo reconoció: «Me siento a gusto. El míster lleva poco tiempo, pero matiza lo que quiere que seamos. Hemos empezado bien? A Valverde le gusta jugar al fútbol y marcar goles, este es un sistema más ofensivo».
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