Unai Emery sí tendrá que decidir si quiere o no continuar en el Valencia. Y si las condiciones que le ofrece el presidente le interesan o no. Manuel Llorente ya ha deshojado la margarita y ha decidido ofrecer la continuidad al técnico. Eso sí, el ofrecimiento no se realizará hasta que el equipo sea matemáticamente tercero. Llorente, tal como hizo hace un año, volverá a proponer al técnico un proyecto de una temporada, con unos emolumentos similares a los que percibe ahora.
Emery, por tanto, tendrá que elegir entre seguir creciendo en un equipo que ya conoce perfectamente -y que dos años consecutivos, con perfiles de jugadores muy diferentes, lo ha clasificado para la Liga de Campeones- o enrolarse en un nuevo proyecto con similares aspiraciones a las del Valencia. Ahora, le toca decidir a él. Y, de las declaraciones de los últimos días, se desprende que hay predisposición del entrenador por liderar su cuarto proyecto en el Valencia. Cantidad de años que, visto la trayectoria de los últimos entrenadores, es complicado ya que hay que remontarse a la etapa de Alfredo Di Stéfano (1970 al 74) para encontrar a un entrenador cuatro temporadas en el banquillo de Mestalla.
Emery se ha ganado, jornada a jornada, la confianza de Manuel Llorente.
En la considerada temporada de transición, el técnico va camino de dejar al equipo en el mismo puesto que la temporada anterior en la que entrenaba, entre otros, a tres campeones del mundo como Villa, Silva o Marchena. Emery, con mimbres muy diferentes y acoplándose a lo que la dirección deportiva le fichaba, ha logrado prácticamente los mismos guarismos -con una plantilla mucho más barata-. Eso sí, las eliminatorias siguen siendo su punto débil.
Trabajador incansable, muy profesional y discreto en sus declaraciones, Emery ha sabido entender al presidente y su filosofía de trabajo. Siempre positivo, y poco amigo de entrar en polémicas, Emery sabe que cuenta con el respaldo de unos jugadores a los que, en más de una ocasión, ha encubierto en sus indisciplinas aunque ello le haya supuesto deteriorar e incluso manchar su imagen. Emery, además, es de los que respeta mucho su parcela y no interfiere en otro tipo de asuntos.
Con Braulio Vázquez, el coordinador de la secretaría técnica, su relación es fluida. Conversan habitualmente y es habitual verlos juntos en Paterna o en estadios cercanos a la ciudad viendo partidos de fútbol. Y, a Llorente, esta sintonía le gusta. Aunque públicamente el presidente nunca se haya pronunciado. Y es que, el dirigente se ciñe a su guión y, tal como ocurrió hace un año, espera a final de temporada para evaluar el trabajo del técnico y decidir. Sin embargo, y viendo el trabajo de este año, la decisión todo incide, que se va a adelantar. Al contrario de lo que ocurrió el año pasado, Emery sí tiene el respaldo de la afición -y más tras la goleada al Villarreal- y un consejero, Fernando Giner, se ha pronunciado públicamente a favor de la renovación dejando entrever que el presidente ya tiene la decisión tomada. Fernando Giner opina que el entrenador "se ha ganado" que el club le proponga renovar su contrato, ya que en su opinión "está haciendo una gran campaña y casi se han cumplido los objetivos". "Creo que (Unai) está haciendo una gran campaña, sacado lo máximo del equipo, y a partir de ahí hay que ofrecerle la renovación, por supuesto que sí. Porque se lo ha ganado y ha cumplido lo que dijo", sostiene. Giner incide en que el objetivo del Valencia de ser tercero está "casi cumplido", por lo que apuesta por iniciar ya las conversaciones con Emery para ampliar su contrato, que finaliza el próximo 30 de junio. "Sabiendo su forma de trabajar, con el resultado que está dando y el objetivo está casi cumplido. Si se cumple el objetivo no habrá ningún problema en ofrecerle la renovación y él será el que diga si quiere seguir en el Valencia", argumenta.
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