El técnico prueba en Paterna el mismo equipo que goleó al Rangers, con la variación de Topal por Albelda.
D. RODRÍGUEZ / F. CALABUIG Unai Emery apostará en Sevilla por la continuidad. Después de tres partidos en los que se perdió el norte —el empate en Glasgow y los traspiés en casa ante Mallorca y Zaragoza—, el Valencia recuperó su poderío el pasado martes con una victoria contundente contra el Rangers en el estadio de Mestalla. La fórmula del éxito, la combinación con la que por fin se encontró la senda del triunfo fue la alineación de dos delanteros entre los siguientes hombres: César; Miguel, David Navarro, Ricardo Costa, Mathieu; Albelda, Banega, Joaquín, Mata; Aduriz y Soldado.
Un bloque que ante los escoceses recondujo el rumbo en un partido trascendental y compuesto por once jugadores que —con la salvedad de dos que han estado ausentes de forma obligada por lesión varias jornadas, Joaquín Sánchez y Éver Banega— encabezan la lista de los que más minutos acumulan en la competición madre, la Liga BBVA. Y un once con el que trabajó ayer el técnico vasco en el primer entrenamiento con vistas al importante duelo del lunes ante el Sevilla en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, con las únicas excepciones de Mehmet Topal en lugar de David Albelda, que se ejercitó al margen debido a unas ligeras molestias, y de Moyà por César. El meta de Coria se marchó del césped antes del final del entreno.
La sesión matinal comenzó con series de carrera para más tarde pasar a ensayar centros y remates en un espacio reducido. Y antes de la conclusión llegó la hora del partido. Enfrente al equipo que gana enteros para repetir en Sevilla estaban: Guaita; Bruno, Stankevicius, Dealbert, Jordi Alba; Maduro, Fernandes, Pablo, Tino Costa, Vicente y Chori Domínguez. La peculiaridad del trabajo de repliegue y presión consistía en que sólamente atacaba la línea ofensiva de cuatro contra la zaga o, en su defecto, seis contra seis cuando los mediocentros también se unían a la elaboración de la jugada.
En esta ocasión al cuerpo técnico blanquinegro le preocupa en menor medida la acumulación de minutos en las piernas de sus jugadores que en jornadas atrás, sobre todo, porque el grupo tendrá prácticamente seis días desde el partido contra los escoceses hasta el del lunes a las nueve y media de la noche. Además, el enfrentamiento copero entre semana ante la UD Logroñés se presenta con menor exigencia tras el 0-3 de la ida. Por ello, en caso de haber rotaciones, serán mínimas.
El lunes, a romper la estadística Uno de los cuatro capitanes del Valencia, el central David Navarro considera «importante» el hecho de que el entrenador encuentre un once al que darle continuidad. «Es importante mantener un bloque, pero el míster decidirá si se hace algún cambio o no, se habla de sistemas pero han sido dos baches. Con un mediapunta fuera de casa también hemos ganado», comentó. Navarro espera que el lunes «se rompa» la estadística que dice que al Valencia se le atragantan los rivales de máximo peso. «El lunes haremos un buen resultado. Debemos jugar como lo hemos hecho hasta ahora fuera de casa», acabó.
¿POR FIN TENDREMOS ENTRENADOR?.
OJALA LE LLEGUE LA CORDURA Y SE DEJE DE INVENTOS.
DESDE LUEGO, NOSOTROS LO ESPERAMOS.
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