´Que el elogio no nos confunda´

Emery está preocupado. El técnico teme que, los buenos resultados, se traduzcan en relajación de los futbolistas y que de ello saque tajada el Hércules (mañana, 17 horas en el Rico Pérez). Emery advierte: "Que el elogio no nos confunda". Y es que, nadie mejor que él, para calibrar la euforia que se respira en el vestuario. Y parece, según se desprende de sus palabras, que no es el clima idóneo. El preparador insiste: "Debemos ser fríos y ser conscientes de que aún no hemos hecho nada". Y va a más: "Que nadie se relaje, porque si no nos empleamos al cien por cien se romperá la racha". Ahí va la prevención.

Que el Valencia ha ganado al Málaga, al Racing y al Bursaspor, es una realidad, pero también lo es que la campaña acaba de arrancar. "Estamos satisfechos de lo que se ha hecho, pero hay que seguir por la línea que se ha trazado, fortalecerla y mejorarla. Ahora tenemos que mirar al siguiente partido y prepararlo al máximo", indicó. De todas formas, el preparador considera que la clave es "mantener el equilibrio independientemente de los resultados". "Hay que ser optimistas, tener confianza, saber armarse de tranquilidad y trazar una línea en la que el equipo esté más cerca de ganar que de perder, pero esto puede cambiar en dos partidos y somos conscientes", asumió.

Emery, algo más serio que en sus anteriores comparecencias, rehuyó comparar las críticas de hace un año con las alabanzas que está recibiendo por convertir al equipo en el único español -dos de liga BBVA y uno en Europa- que suma sus partidos por victorias. "En el fútbol sólo existe el ganar o el perder; uno representa todo lo positivo y lo otro todo todo lo negativo. Si se pierde, decís -en alusión a la prensa- que las rotaciones son malas, si se gana, que están bien hechas", reflexionaba. Sin embargo, el vasco se vanaglorió de la satisfacción que embarga a la afición. "Es bueno que se hable de fútbol, que haya ilusión por el Valencia, que el equipo consiga objetivos y que se tenga un buen rendimiento", sostuvo.

Al técnico le han hablado, desveló, de la rivalidad entre el Valencia y el Hércules. Y del ambiente del Rico Pérez. "Debe darse un ambiente de fútbol dentro de la deportividad", deseó. "Tiene que ser una fiesta para Alicante y para los valencianos que vayan. Los dos equipos pueden ofrecer un buen partido. El Hércules se ha reforzado bien. Los tres puntos son preciados para los dos, pero si queremos ganar debemos prepararlo desde la buena mentalidad", relató. "Ellos -avisó-querrán ganar en su casa ante su público para demostrar que lo de Barcelona no fue casualidad", remarcó. Así, Emery definió al Hércules como un equipo que "ha cambiado de futbolistas del primer partido al segundo y al margen de eso hay un estilo de juego en un equipo muy bien dirigido por su entrenador". "Espero un buen Hércules, tenemos que aplicarnos", dijo.

"No debemos caer en la euforia, porque aún no hemos hecho nada"

El mensaje lanzado por Emery parece haber calado en la plantilla. Al menos, si se toman las reflexiones de Juan Mata como baremo. "No hay que caer en la euforia porque todavía no hemos hecho nada", apuntaba. El jugador, que ayer participó en la recepción en la Generalitat Valenciana con la Copa del Mundo, valoró positivamente el arranque. "Es una buena noticia que se haya empezado tan bien, se han ganado los tres partidos oficiales pero no hay que caer en la euforia de que ahora el Valencia sea el mejor, porque queda mucho y no se ha hecho nada".

Mata aseguró que el encuentro contra el Hércules "será un partido bonito, más que nada porque es un derbi autonómico" y deseó que "sea bonito y gane el Valencia". El valencianista recordó que el Hércules llega al partido "crecido" y "seguro que tienen muchas ganas de volver a ganar en casa y de brindarles el triunfo a su afición". "Nosotros venimos también de ganar tres partidos y queremos seguir con esa buena racha", deseó. Mata consideró que el Hércules es "un buen equipo, ha fichado jugadores con mucho nombre y que tienen experiencia". "Creo que va a hacer un buen papel esta temporada", pronosticó el campeón del mundo que ayer, dos meses después, volvió a sostener la Copa del Mundo.