Nada se escapa a los tentáculos de la araña turca. Así ha sido desde que llegó al Valencia, con el que cuenta sus participaciones en partidos oficiales por victorias, y así debería ser mañana en Ibrox Park. Porque los blanquinegros necesitan puntuar para no meterse en serios problemas y porque Unai Emery tirará mano del incalculable despliegue físico y del 1´87 de estatura de Mehmet Topal para contrarrestar el proverbial músculo y juego aéreo del Rangers. «Que nadie lo dude, vamos a ganar», avanza el turco, quien regresará a la alineación justo 15 días después de sufrir un esguince en el tobillo derecho del que se ha recuperado como si nada.
Pese a su trayectoria internacional, será la primera vez que el mediocentro pise territorio escocés. Pero se sentirá como en casa. «Por lo que tengo entendido, el ambiente allí es muy parecido al de los campos de mí país. La gente anima sin parar a su equipo, pero, por mucho que lo haga, no marcará ningún gol», destaca Mehmet, quien tendrá enfrente a futbolistas para él «desconocidos», como el norteamericano Maurice Edu. A quien no se enfrentará es a Lee McCulloch, fijo como pivote de contención en el cuadro protestante, quien se lesionó el martes pasado con España jugando con su selección.
Mehmet resta importancia al actual tercer puesto blanquinegro en el grupo C. Es más, está convencido que el equipo puede asegurarse prácticamente un billete en la siguiente ronda de la Liga de Campeones en apenas dos semanas. «Es un rival fuerte, pero tenemos muchos más recursos que el Rangers y debemos sumar los seis puntos. No me planteo que no nos clasifiquemos para octavos», afirma el mediocentro respecto al doble enfrentamiento que espera a los de Emery ante los escoceses.
Fue precisamente en su país, en Turquía y ante el Bursaspor, con un 0-4 inapelable, donde el Valencia demostró de lo que es capaz. Al menos, Topal defiende esa idea y califica lo sucedido frente al Manchester United de mero «accidente». «Hicimos un buen partido; teníamos que haber sacado un empate o una victoria, pero ellos tuvieron la suerte que nos faltó a nosotros», analiza el internacional otomano.
Contento de compartir vestuario y luchar por un puesto con Albelda, rehuye cualquier tipo de debates sobre si uno, otro o los dos tienen que ser titulares. Lo suyo, sobre todo mientras deba defenderse como puede en inglés y con las nociones que cada tarde adquiere de castellano, es hablar más dentro que fuera del terreno de juego. Sobre el césped, tejiendo la red en la que quedan atrapados los futbolistas rivales, es donde más a gusto se siente.
Es el Tino Costa, como en el estreno de la Liga de Campeones y ante el Hércules, quien más opciones tiene de compartir mediocentro con Mehmet en el encuentro de Ibrox Park. Eso, al menos, es lo que puso ayer a prueba ayer en el entrenamiento. El técnico blanquinegro confía que el trabajo sucio del turco libere lo suficiente al ex del Toulouse como para explotar su desplazamiento de balón en largo y su llegada a la portería contraria.
El Camp Nou no es problema
Topal ha extraido una conclusión positiva de la primera derrota valencianista de la temporada. Por muy doloroso que fuera, cree que del 2-1 del Camp Nou hay que quedarse con una primera mitad «magnífica». «Hasta el descanso fuimos mejores que el Barça, que para casi todos es el mejor equipo del mundo», destaca el otomano, quien expone que su Valencia «demostró que puede dar muchas alegrías esta temporada».
Tampoco le quita el sueño ya el esguince de tobillo que sufrió hace dos semanas en un entrenamiento. Si hace siete días, mucho antes de lo previsto, estaba de nuevo de vuelta con el grupo, ahora ni siquiera luce el vendaje comprensivo en la articulación. Ésta responde a las mil maravillas y se encuentra totalmente preparada para plantar cara al Rangers. Ha regresaro la araña turca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario