Gran partido y doblete...
Estoy muy contento por cómo salió todo, el equipo ganó, dio una buena imagen y encima pude marcar dos goles bonitos.
El equipo deja una buenas sensaciones en su primer partido...
Era muy importante dejar un buen sabor de boca y lo hicimos. Dimos una imagen de equipo firme durante todo el partido, aunque es cierto que sufrimos un poco por momentos, se jugó bien al fútbol y lo más importante es que el equipo sigue teniendo su filosofía y debe seguir en este camino, no desviarnos nunca.
¿Tienen más libertad los futbolistas ofensivos este año?
El míster quiere que no tengamos una posición fija que busquemos por el centro, por una banda luego cambiar a la otra. Creo que nos estamos beneficiando de la movilidad que tienen futbolistas como Aduriz, Mata, Vicente, Pablo, Banega... Hay calidad arriba.
El brazalete de capitán y el '7' parece que le hayan dado alas...
-(Se ríe) Mis goles en Málaga vienen gracias al equipo. Es verdad que el '7' parece que esté tocado por un varita mágica y tenga esa estrellita goleadora. Me está dando suerte cada vez que lo llevo, pero es algo anecdótico porque luego las que corren son mis piernas, las de siempre.
El primer gol se lo guisa y se lo come Joaquín, pero qué gran complicidad entre los compañeros en el segundo tanto...
Nos entendemos muy bien, somos un grupo que lleva bastantes años trabajando juntos, con la misma filosofía de toque y quedó demostrado en esa jugada que no existen egoísmos en el vestuario.
Unai le puso como ejemplo de futbolista que está asumiendo responsabilidades. ¿Contento?
Años atrás me ha faltado la regularidad de partidos y de goles y este año he tomado la iniciativa por mí, quiero estar bien, por eso he cogido la forma rápido y las primeras sensaciones son buenas. He dado un paso adelante porque otros años atrás me ha faltado ser un jugador más determinante. Este año quiero disfrutarlo a tope y espero que no termine nunca.
Albelda dijo en AS que el brazalete al que mejor le iba a venir era a Joaquín...
Me siento importante y muy querido por mis compañeros. Me demuestran día a día todo el cariño y el respeto que me tiene ese vestuario, y eso va en beneficio de mi faceta futbolística porque siempre ayuda. Con mi forma de ser, todo esto me está ayudando a ser mejor.
Cumplió su palabra y a la hora de la verdad se ganó en Málaga...
La pretemporada son pruebas y sabíamos lo que había en juego en Málaga.
¿Qué es lo que más le gusto?
Los gestos que vi en los abrazos y en las sonrisas de los compañeros. Se nota que hay un gran grupo humano.
¿A quién le dedicó el doblete?
A mi compañero Bruno, me anima y es un buen amigo. A mi familia que estuvo en La Rosaleda y a mi futura hija que está apunto de nacer, a mi mujer y a mi hija.
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