El sistema que más tiempo ha tenido en la pretemporada se queda en un segundo plano para el debut en Málaga
Dice una máxima en la libreta del entrenador que «los sistemas los hacen buenos los jugadores» y a pesar de las pruebas realizadas durante la pretemporada, el Valencia va a comenzar el curso en La Rosaleda de Málaga con un 4-2-3-1. De momento, la opción del 4-3-3 —que tanta dedicación ha tenido hasta ahora— se aparca… pero no se olvida. Para Unai Emery, lo importante es tener varias alternativas de juego para utilizarlas en función del partido y el rival, pero como hasta ahora han habido más sombras que luces con el planteamiento táctico que quiere implantar y requiere de más trabajo, lo mejor es dejarlo para más adelante. Suele decirse del técnico nacido en Hondarribia que es muy «cabezón» y cuando tiene una idea en su cabeza no para hasta conseguirla, pero eso no significa que se ponga una venda en sus ojos. Ahora bien, Unai considera que el 4-3-3 es un recurso necesario y se ha trabajado durante la pretemporada para utilizarlo cuando convenga, ya que el otro sistema está ya implantado en el grupo.
En Lecce el Valencia jugó con los dos sistemas arriba mencionados; la primera parte con las dos líneas de tres, la segunda, con el planteamiento más clásico de las últimas temporadas. Es cierto que se ganó (0-2) con un gol en cada período, pero la imagen fue distinta, bastante mejor tras el descanso. Ni los jugadores ni el presidente acabaron satisfechos con esos primeros 45 minutos, tampoco el cuerpo técnico acabó satisfecho plenamente, pero sería injusto no reconocer que el Lecce no les creó ninguna ocasión clara de gol y el VCF se puso 0-1 en el marcador. ¿Lo mejor? El equipo debe tener más consistencia en la línea de medios. ¿Lo peor hasta el momento? Que se está perdiendo capacidad ofensiva. ¿Tiene la plantilla futbolistas para apostar por ese 4-3-3? Emery es el que más conocimientos tiene sobre sus jugadores.
En la Liga BBVA hay un equipo que escenifica a la perfección este planteamiento táctico, que es el Barça, pero dispone de tres futbolistas en la línea de medios que tienen mucha movilidad y a la vez llegada al rival, requisitos necesarios para que el 4-3-3 funcione. Unai tiene futbolistas que se pueden adaptar a ese sistema, algunos ya lo hicieron en el pasado curso, pero de momento es un sistema que chirría. Y a la vista está que el VCF pierde capacidad ofensiva siguiendo ese patrón de juego, cuando está diseñado precisamente para lo contrario. Algo falla y lo mejor es seguir entrenándolo para utilizarlo más adelante. En Málaga Unai apostará por el 4-2-3-1, planteamiento que tiene más asentado el equipo, como se comprobó ante la Fiorentina hace unos días. Tan claro lo tiene el técnico que el once inicial será muy similar al que se enfrentó a los italianos, con el cambio de César por Moyà, y la única duda —al margen de Soldado— es Maduro o Navarro atrás.
http://www.superdeporte.es/valencia/2010/08/25/emery-decide-aparcar-4-3-3/103757.html
Dice una máxima en la libreta del entrenador que «los sistemas los hacen buenos los jugadores» y a pesar de las pruebas realizadas durante la pretemporada, el Valencia va a comenzar el curso en La Rosaleda de Málaga con un 4-2-3-1. De momento, la opción del 4-3-3 —que tanta dedicación ha tenido hasta ahora— se aparca… pero no se olvida. Para Unai Emery, lo importante es tener varias alternativas de juego para utilizarlas en función del partido y el rival, pero como hasta ahora han habido más sombras que luces con el planteamiento táctico que quiere implantar y requiere de más trabajo, lo mejor es dejarlo para más adelante. Suele decirse del técnico nacido en Hondarribia que es muy «cabezón» y cuando tiene una idea en su cabeza no para hasta conseguirla, pero eso no significa que se ponga una venda en sus ojos. Ahora bien, Unai considera que el 4-3-3 es un recurso necesario y se ha trabajado durante la pretemporada para utilizarlo cuando convenga, ya que el otro sistema está ya implantado en el grupo.En Lecce el Valencia jugó con los dos sistemas arriba mencionados; la primera parte con las dos líneas de tres, la segunda, con el planteamiento más clásico de las últimas temporadas. Es cierto que se ganó (0-2) con un gol en cada período, pero la imagen fue distinta, bastante mejor tras el descanso. Ni los jugadores ni el presidente acabaron satisfechos con esos primeros 45 minutos, tampoco el cuerpo técnico acabó satisfecho plenamente, pero sería injusto no reconocer que el Lecce no les creó ninguna ocasión clara de gol y el VCF se puso 0-1 en el marcador. ¿Lo mejor? El equipo debe tener más consistencia en la línea de medios. ¿Lo peor hasta el momento? Que se está perdiendo capacidad ofensiva. ¿Tiene la plantilla futbolistas para apostar por ese 4-3-3? Emery es el que más conocimientos tiene sobre sus jugadores.
En la Liga BBVA hay un equipo que escenifica a la perfección este planteamiento táctico, que es el Barça, pero dispone de tres futbolistas en la línea de medios que tienen mucha movilidad y a la vez llegada al rival, requisitos necesarios para que el 4-3-3 funcione. Unai tiene futbolistas que se pueden adaptar a ese sistema, algunos ya lo hicieron en el pasado curso, pero de momento es un sistema que chirría. Y a la vista está que el VCF pierde capacidad ofensiva siguiendo ese patrón de juego, cuando está diseñado precisamente para lo contrario. Algo falla y lo mejor es seguir entrenándolo para utilizarlo más adelante. En Málaga Unai apostará por el 4-2-3-1, planteamiento que tiene más asentado el equipo, como se comprobó ante la Fiorentina hace unos días. Tan claro lo tiene el técnico que el once inicial será muy similar al que se enfrentó a los italianos, con el cambio de César por Moyà, y la única duda —al margen de Soldado— es Maduro o Navarro atrás.
http://www.superdeporte.es/valencia/2010/08/25/emery-decide-aparcar-4-3-3/103757.html
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