El portugués cuajó un gran partido en su vuelta a Mestalla, con asistencia de gol incluida; fue recibido con silbidos.
ANDRÉS GARCÍA De villano a héroe. Miguel Brito fue recibido en Mestalla en medio de una pitada similar a la de la noche de la presentación y acabó convertido en uno de los jugadores del Valencia más ovacionados del partido después de noventa minutos en los que demostró que puede ser ese «uno más» que le pedía Emery. El portugués cuajó un buen partido, estuvo muy activo a pesar de las críticas que tuvo que escuchar en los primeros minutos del partido y acabó siendo protagonista en el único gol del partido al recibir una asistencia de Jonas, correr la banda y ponerle un balón en bandeja a Soldado. No era fácil, pero Miguel consiguió ayer lo que nadie esperaba. Cambiar los pitos del inicio por los aplausos del final.
Mestalla reconoció el trabajo de Miguel en el lateral derecho. El luso se mostró serio en la defensa, cortó milagrosamente un contragolpe del Atlético de Madrid que era medio gol, dobló una y otra vez a Pablo Hernández, presionó —en una jugada se le vio corriendo hasta la banda izquierda— y puso dos balones interesantes llegando a línea de fondo. El primero no encontró ningún rematador, pero el segundo pase acabó en la red después de un espectacular cabezazo de Soldado. No solo la afición reconoció el esfuerzo y la aportación de Miguel en el partido de anoche. También lo tuvieron muy en cuenta sus propios compañeros. Tanto Soldado como el resto de jugadores se fueron a buscar al luso después del gol. Un gesto con el que la plantilla quiso arropar a Miguel después del mal rato que había pasado en los primeros compases.
No todo fue perfecto, el luso cometió algún fallo en la entrega, sin embargo sus fallos fueron aislados y acabó completando uno de los partidos más redondos que se le recuerdan en los últimos tiempos. Y todo en la vuelta de Miguel a Mestalla después del enfado de la afición. Con Bruno lesionado y Barragán sin estar totalmente adaptado al equipo, Emery le abrió las puertas de la titularidad junto a Víctor Ruiz en el centro de la defensa y Mathieu en la lateral izquierdo. El vasco quería que el portugués fuera uno más y que ayudará al equipo a ganar y así lo hizo. El luso contribuyó al que el equipo mejorara en la defensa y acabara el partido con la portería a cero, lejos de los tres goles que encajó en el primer partido de la Liga BBVA contra el Racing de Santander.
Miguel jugó los últimos minutos del encuentro mermado físicamente, como buena parte de sus compañeros. El luso, que jugó los noventa minutos después de mucho tiempo de inactividad, acusó el cansancio, pero aguantó el tipo y frenó las acometidas de los Falcao, Reyes, Arda Turan, Juanfran, Diego y toda la artillería que Manzano puso en el césped durante los últimos minutos. La pregunta es: ¿seguirá teniendo continuidad Miguel con Bruno Saltor y Barragán?
http://www.superdeporte.es/valencia/2011/09/12/miguel-convirtio-pitos-mestalla-aplausos/138588.html
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