La selección española puede con todo. Ha batido en los últimos tiempos a cinco campeones del mundo, ahora tocó Argentina, y va camino de incluir este título en su currículum. Se sobrepuso al juego extraordinariamente agresivo de la albiceleste, infractor del reglamento en la mayoría de acciones, y a la actuación arbitral, escamoteador de tres penaltis clarísimos. Tuvo que ser el cuarto, al fin señalizado, y convertido por Xabi Alonso, para sentenciar este apasionante encuentro, cumbre de los brillantes actos que ha celebrado la RFEF a propósito de la celebración de su centenario. El combinado nacional disfrutó, durante buena parte del tiempo, del estilo que le gusta, y tuvo que afrontar situaciones que se repetirán en el Mundial de Sudáfrica. Pero pasó la prueba y con nota, aunque, a buen seguro, confiará en no encontrarse en el camino con tantas adversidades acaecidas esta noche de sábado, 14, en el estadio Vicente Calderón, lleno y convertido en una fiesta.
Que fue principalmente, gracias a su espectacular inicio. España le bailó a la albiceleste, tocada en su orgullo, siempre con arrojo, a menudo, con acciones fuera de lugar. La Roja no perdió nunca su dibujo, pese al duro estilo del rival, impotente al verse privado de poder jugar a algo, y conectó nuevamente con armonía, a través de pases cortos, velocidad en las transiciones y combinaciones de juego interior y por los extremos. El blanquinegro Silva, maravilloso cuando entraba en contacto con el cuero, participó en el primer gol, con una jugada hilvanada junto a Villa, que permitió al gran canario un disparo cruzado, repelido por Romero, y empujado a puerta vacía por Xabi Alonso.
El encuentro no tenía nada de amistoso, salvo para el colegiado, Alan Kelly, permisivo hasta el extremo con los argentinos, y errado en no señalar dos penaltis clarísimos a Villa; el primero, después de un disparo del ‘7’ a puerta vacía, que paró debajo de los palos Coloccini con su brazo, y una zancadilla, bien disimulada, de Demichelis, cuando encaraba a puerta. Desde luego, el rol del Guaje era el más complicado de todo el equipo nacional, con el trabajo sin brillo en su presión a la salida del juego rival para entorpecer su fluidez, y su pugna, feroz, con hasta tres defensas sudamericanos en ocupar un espacio en ataque. Pese a la dificultad, David fue capaz de disfrutar de varias oportunidades claras, la mentada del penalti, y otro disparo, escorado a la izquierda, con una parada de mérito de Romero.
La reanudación prolongó la nefasta actuación del colegiado. Bien es cierto que Argentina apareció más enchufada que España gracias, en parte, a su otro fútbol, aquel que dominan los equipos cancheros, ayudados por el árbitro que ignoró otra pena máxima, la tercera, en esta oportunidad a Iniesta, y señaló otro que no existió, de Albiol. Messi, poco participativo hasta la fecha, empató a uno. La flagrante injusticia reactivó el circuito de los españoles, empeñados en demostrar que son mejores en lo que se trata, en jugar con la pelota. Los últimos 20 minutos de La Roja fue un espectáculo de intensidad y sirvió para simular lo que le espera en el próximo Mundial. La entrada de Mata, en la recta final, sirvió para darle un plus de velocidad en ataque , y Alan Kelly no tuvo más remedio que pitar un penalti a favor, el cuarto de todo el lance, que ejecutó a la perfección Xabi Alonso, bigoleador de la noche.
Ficha técnica
España 2: Iker Casillas (Reina, m.88); Sergio Ramos, Puyol (Raúl Albiol, m.46), Piqué, Capdevila; Busquets, Xabi Alonso, Xavi (Cesc, m.61), Iniesta (Navas, m.82), Silva (Negredo, m.65); y Villa (Mata, m.82).
Argentina 1: Sergio Romero; Coloccini, Demichelis, Heinze, Ansaldi; Maxi, (Lavezzi, m.83), Mascherano, Gago (Cambiasso, m.74), Di María; Higuaín (Tevez, m.58) y Messi (Perotti, m.83).
Goles: 1-0, m.15: Xabi Alonso. 1-1, m.60: Messi de penalti. 2-1, m.85: Xabi Alonso de penalti.
Árbitro: Allan Kelly (IRL). Amonestó a Busquets (25) por España, y a Heinze (28), Coloccini (30), Ansaldi (41), Gago (61), Tévez (64) y Demichelis (81) por Argentina.
Incidencias: Encuentro conmemorativo del centenario de la RFEF, celebrado en el estadio Vicente Calderón, lleno, con 54.000 espectadores en las gradas. Se guardo un minuto de silencio en memoria del portero alemán Robert Enke.
Villa: " Es el árbitro es el que tiene que permitir estas cosas o no"
“Ha sido un poco brusco el partido. Pero el árbitro es el que tiene que permitir estas cosas o no, y después de cómo ha sido el partido, es raro que hayan acabado los once de Argentina el partid. Creo que en un partido oficial hubiera sido diferente. No se permite tanto y algún jugador se hubiera ido a la ducha. Pero han logrado su objetivo y nos han frenado así en la segunda parte cuando el partido estaba controlado. Está claro en que no jugamos para la grada ni para lucirnos. Éste es nuestro juego y en este aspecto, para bien y para mal, es el que es, y es el árbitro el que tiene que cortar las patadas. Estoy con ganas de que llegue el Mundial por un lado pero consciente de que aún hay cosas en juego. Por una parte, el Mundial se ve cerca por las ganas; pero, por otra está, lejos por todo lo que hay en juego y la tela que cortar. Por ganas queremos estar allí, pero hay mucho que pelear antes de estar allí".
Que fue principalmente, gracias a su espectacular inicio. España le bailó a la albiceleste, tocada en su orgullo, siempre con arrojo, a menudo, con acciones fuera de lugar. La Roja no perdió nunca su dibujo, pese al duro estilo del rival, impotente al verse privado de poder jugar a algo, y conectó nuevamente con armonía, a través de pases cortos, velocidad en las transiciones y combinaciones de juego interior y por los extremos. El blanquinegro Silva, maravilloso cuando entraba en contacto con el cuero, participó en el primer gol, con una jugada hilvanada junto a Villa, que permitió al gran canario un disparo cruzado, repelido por Romero, y empujado a puerta vacía por Xabi Alonso.
El encuentro no tenía nada de amistoso, salvo para el colegiado, Alan Kelly, permisivo hasta el extremo con los argentinos, y errado en no señalar dos penaltis clarísimos a Villa; el primero, después de un disparo del ‘7’ a puerta vacía, que paró debajo de los palos Coloccini con su brazo, y una zancadilla, bien disimulada, de Demichelis, cuando encaraba a puerta. Desde luego, el rol del Guaje era el más complicado de todo el equipo nacional, con el trabajo sin brillo en su presión a la salida del juego rival para entorpecer su fluidez, y su pugna, feroz, con hasta tres defensas sudamericanos en ocupar un espacio en ataque. Pese a la dificultad, David fue capaz de disfrutar de varias oportunidades claras, la mentada del penalti, y otro disparo, escorado a la izquierda, con una parada de mérito de Romero.
La reanudación prolongó la nefasta actuación del colegiado. Bien es cierto que Argentina apareció más enchufada que España gracias, en parte, a su otro fútbol, aquel que dominan los equipos cancheros, ayudados por el árbitro que ignoró otra pena máxima, la tercera, en esta oportunidad a Iniesta, y señaló otro que no existió, de Albiol. Messi, poco participativo hasta la fecha, empató a uno. La flagrante injusticia reactivó el circuito de los españoles, empeñados en demostrar que son mejores en lo que se trata, en jugar con la pelota. Los últimos 20 minutos de La Roja fue un espectáculo de intensidad y sirvió para simular lo que le espera en el próximo Mundial. La entrada de Mata, en la recta final, sirvió para darle un plus de velocidad en ataque , y Alan Kelly no tuvo más remedio que pitar un penalti a favor, el cuarto de todo el lance, que ejecutó a la perfección Xabi Alonso, bigoleador de la noche.
Ficha técnica
España 2: Iker Casillas (Reina, m.88); Sergio Ramos, Puyol (Raúl Albiol, m.46), Piqué, Capdevila; Busquets, Xabi Alonso, Xavi (Cesc, m.61), Iniesta (Navas, m.82), Silva (Negredo, m.65); y Villa (Mata, m.82).
Argentina 1: Sergio Romero; Coloccini, Demichelis, Heinze, Ansaldi; Maxi, (Lavezzi, m.83), Mascherano, Gago (Cambiasso, m.74), Di María; Higuaín (Tevez, m.58) y Messi (Perotti, m.83).
Goles: 1-0, m.15: Xabi Alonso. 1-1, m.60: Messi de penalti. 2-1, m.85: Xabi Alonso de penalti.
Árbitro: Allan Kelly (IRL). Amonestó a Busquets (25) por España, y a Heinze (28), Coloccini (30), Ansaldi (41), Gago (61), Tévez (64) y Demichelis (81) por Argentina.
Incidencias: Encuentro conmemorativo del centenario de la RFEF, celebrado en el estadio Vicente Calderón, lleno, con 54.000 espectadores en las gradas. Se guardo un minuto de silencio en memoria del portero alemán Robert Enke.
Villa: " Es el árbitro es el que tiene que permitir estas cosas o no"
“Ha sido un poco brusco el partido. Pero el árbitro es el que tiene que permitir estas cosas o no, y después de cómo ha sido el partido, es raro que hayan acabado los once de Argentina el partid. Creo que en un partido oficial hubiera sido diferente. No se permite tanto y algún jugador se hubiera ido a la ducha. Pero han logrado su objetivo y nos han frenado así en la segunda parte cuando el partido estaba controlado. Está claro en que no jugamos para la grada ni para lucirnos. Éste es nuestro juego y en este aspecto, para bien y para mal, es el que es, y es el árbitro el que tiene que cortar las patadas. Estoy con ganas de que llegue el Mundial por un lado pero consciente de que aún hay cosas en juego. Por una parte, el Mundial se ve cerca por las ganas; pero, por otra está, lejos por todo lo que hay en juego y la tela que cortar. Por ganas queremos estar allí, pero hay mucho que pelear antes de estar allí".
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