JACOCHE, NUESTRO HERMANO Y SUS PALABRAS DE CORAZÓN BLANQUINEGRO

Primero, voy a decir una cosa obvia, que no me canso de remitir en estas páginas: quien entre aquí se llena de valencianimo, anoche tuve el placer de leer este comentario, no lo comenté porque estaba en las últimas facultades físicas y mentales, pero hoy, con café en mano, lo hago porque me ha llegado.Es bien sabido que cuando un jugador hace acciones de colaboración con ONGs; una entrevista llena de valencianismo (gracias Pipo); 4 palabras llenas de un solo repertorio dialéctico que es callar bocas (así se habla Albiol); remitir a su agente que toda la panda de mangantes que intenten hacerce con sus servicios por debajo de la mesa primero tienen que consultarle al club que tiene sus derechos (muy bien estipulado por tu parte "7" de España); o un director deportivo saliendo y haciendo públicas unas palabras de "el Valencia CF ahora mismo no vende a nadie, sólo le preocupa entrar en Champions", es algo que la afición, condecora, demuestra signos de orgullo, se siente oida, respetada y querida, y sigue con el único pensamiento de animar para conseguir lo que sueña, todo eso, son palabras que todos y cada uno de los valencianistas sabemos de sobra, desde los que están en Valencia hasta los que siguen el club desde un Barrio de Tenerife, Asia, África o el continente americano.

Ahora bien, muchas entradas hay que pagar como jugadores para quitar de la cabeza la imagen que se vio en el Calderón. Es duro decir esto como aficionado después de este buen gesto por parte de los jugadores, pero la crítica nos permite desahogarnos, exigir y gritar lo que queremos, porque como bien dijo un sabio, esta entidad es más que un club, arrastra miles de sentimientos, orgullo y honor por un escudo, y todo eso, cuando el equipo se juega algo importante y se ve lo que todos vimos, hiere la parte más interna de un valencianista, se sufre y eso no lo quiere nadie.

Solo espero que cuando hagan este acto de buena fe de cara al aficionado, sea una inyección de razón y de conciencia acerca de lo que nos jugamos en el Madrigal, que no se vuelva a ver un partido como el que se vivió el pasado domingo en Madrid, que se demuestre lo que somos y estemos en el lugar en el que debemos estar, que pensemos en esta jornada que vuestro sueldo y vuestra fama es inferior a vuestra entrega y sacrificio, porque es fácil de comprender que toda la afición tiene el símbolo del club muy por encima de todos los que conforman la plantilla, los jugadores.

Sigo teniendo fe, espero que no se agote en el siguiente partido, y cuando se me agote, espero que sea porque no se ha podido hacer más, pero que se intente, que se me llene la mente de pensamientos de impotencia, pero que se juegue como sabemos, que se salga al campo con la mentalidad que se tuvo contra el todopoderoso Barça o en el cherreo al equipo merengón, así hay 20mil posibilidades más de decir que el ppartido del otro día tiene ahora remedio.

Amunt Valencia CF hasta la muerte.