Emery tiene la fórmula anti-Madrid

Si alguien sabe cómo ganar y golear al Real Madrid en su casa ese es Emery. El de Hondarribia se ha convertido en un auténtico especialista durante los últimos años como entrenador del Almería y del Valencia.

Tres veces lo ha recibido en su estadio y tres veces le ha vencido con un espectacular balance de ocho goles a favor y sólo dos en contra. El vasco le tiene tomada la medida a los blancos con trabajo y fuerza en el centro del campo, una presión asfixiante, contundencia defensiva y pegada, mucha pegada. Esos fueron cuatro de los denominadores comunes a los que recurrió tanto en el Juegos del Mediterráneo como en Mestalla. Esa es la fórmula anti-Madrid. Emery comenzó a desnudar las carencias del Madrid desde muy pronto. Fue en la jornada 22 de su debut en Primera con el Almería. El vasco frenaba a los de Schuster después de ocho victorias consecutivas y tres meses invicto lejos de casa gracias a un 2-0 con un gol a balón parado de Juanito y otro de penalti de Negredo.

La mejor colocación, la distribución de espacios, el mayor orden y atrevimiento en la presión, la superioridad en jugadas de estrategia y la actitud más positiva fueron algunas de las virtudes de aquel Almería de Unai.«Nosotros hemos hecho una presión muy fuerte», reconocía el propio entrenador.

Una receta que volvería a repetir meses más tarde en el banquillo de Mestalla en la ida de la Supercopa de España. Aquel 17 de agosto de 2008, Emery volvía a ganarle (3-2) la partida a los blancos con mucha intensidad y goles de Mata, Villa y Vicente. Fue un encuentro más ajustado con Albelda y Baraja en el centro del campo —acabó apostando por Manuel Fernandes en lugar del ´Pipo´ para ganar en consistencia—, de más alternativas y con dos factores extra: los desdobles de los laterales y la velocidad de los de arriba.

No fue casualidad. Esa misma temporada, ocho meses después de la Supercopa, Emery le daba un auténtico repaso a un equipo, entonces dirigido por Juande, que se despedía de la Liga. Esta vez fue Baraja el que, compartiendo mediocentro con Marchena, desquició a los Gago, Javi García, Van der Vaart y compañía. Tres a cero. Las mismas victorias que lleva el de Hondarribia cuando juega como local contra los blancos. Y es que, Emery tiene la fórmula anti-Madrid.